Conozca dónde duermen los niños refugiados

El fotógrafo sueco, dos veces ganador del premio World Press Photo, Magnus Wennman, fue el encargado de tomar las fotos de los niños sirios refugiados como parte de su proyecto fotográfico Dónde duermen los niños (Where the Children Sleep) . 

Miles de refugiados siguen llegando a Europa para huir la violencia y de la guerra que hay en sus países de origen. A pesar de los peligros de la travesía, asumen el riesgo para llegar a Estados europeos que, en muchos casos, escogen cerrar sus fronteras e impedir la entrada de esas personas. De ese modo, las naciones del llamado viejo continente desconocen su responsabilidad en la crisis humanitaria que enfrentan países de África y el Oriente Medio. 

Walaa de 5 años, en Dar-El-Ias (Líbano). Su madre asegura que llora todas las noches ya que quiere irse a su casa, "Allá nunca solía llorar a la hora de dormir". 

Desde el año 2011, Siria ha sido escenario de una escalada de violencia, producto de las acciones terroristas perpetradas por mercenarios financiados por potencias occidentales, cuyo objetivo es derrocar al presidente Bashar Al Assad.

Ahmed de 6 años, en Horgos (Serbia). Lleva su propia maleta en las grandes distancias que su familia recorre a pie. "Él es muy valiente y solo llora algunas veces por la noche", dice su tío que cuida de él después que su padre fuera asesinado en su ciudad natal, Deir ez-Zor, al norte de Siria. 

El paso por Serbia se ha convertido en una de las rutas más afluentes de los refugiados, quienes huyen de los conflictos que se viven en sus países, provocados por la intervención extranjera y grupos extremistas.

Ralia de 7 años y Rahaf de 13, en Beirut (Líbano). Viven en las calles de Beirut son de Damasco, donde una granada mató a la madre y a su hermano. 

Actualmente, el Líbano es el hogar de unos 2 millones de refugiados sirios, entre registrados y no registrados, lo que significa que los refugiados constituyen ahora un tercio de toda la población libanesa.

Maram de 8 años, en Ammán (Jordania).Tiene la mandíbula rota y no puede hablar, tras caerle un trozo de tejado sobre su cabeza cuando un misil impactó en su casa. Sufrió traumatismo craneal, lo que le causó una hemorragia cerebral y estuvo en coma durante 11 días. Su madre y ella fueron enviadas en avión a la frontera de Jordania. 

Tras los ataques y la ofensiva que lleva a cabo el Ejército árabe sirio, más de 3 mil terroristas del autodenominado Estado Islámico abandonaron sus puestos y se dirigieron a Jordania y Turquía.

Con más de 25 incursiones aéreas por parte de fuerzas militares rusas, al menos nueve centros de mando, depósitos de armas y municiones, y fábricas de explosivos del Estado Islámico y sus grupos aliados fueron destruidos en zonas rurales y campiñas en las afueras de Siria.

Shehd de 7 años, en la frontera húngara. Su madre relata que si la familia hubiese sabido lo complicado que es realizar el viaje, se habría quedado en Siria corriendo el riesgo. 

Hungría es uno de los países de la Unión Europea, junto a Eslovenia, Eslovaquia República Checa y Rumanía, que se han negado a recibir cuotas de refugiados. Esa nación construyó una valla alambrada de más de 175 kilómetros de extensión para detener la oleada de refugiados que llegan desde Serbia.

Abdullah de 5 años, en Belgrado (Serbia). Durante los últimos días ha estado durmiendo fuera de la Estación Central de Belgrado. Presenció el asesinato de su hermana en su casa de Daraa. Sigue aún conmocionado y tiene pesadillas cada noche, cuenta su madre. 

Siria ahora es el país con mayor cantidad de refugiados en el mundo, por encima de Afganistán, Somalia y el resto de los países de África y Medio Oriente combinados.


Fara de 2 años, en Azraq (Jordania) le encanta el fútbol, su padre trata de hacer pelotas para ella estrujando cualquiera cosa que encuentra, pero no duran mucho. 

En los últimos meses, Europa ha experimentado la peor crisis de refugiados desde la Segunda Guerra Mundial. Hasta octubre de 2015 más de 681 mil personas llegaron a ese continente luego de cruzar el Mediterráneo. Al menos 3 mil 175 han perdido la vida durante la peligrosa travesía.

Ahmad de 7 años, en Horgos (Serbia), estaba en la casa familiar cuando una bomba cayó sobre él, en Idlib. La metralla impactó en su cabeza, pero él salió con vida, su hermano pequeño no. 

Serbia asegura que hasta la fecha han pasado 85 mil refugiados hacia Croacia, sin embargo, este país ha calificado esa versión de "exagerada", aludiendo que solo han sido 44 mil.

Iman de 2 años, en Azraq (Jordania), tiene neumonía y una enfermedad respiratoria. Este es su tercer día en esta cama de hospital. 

De acuerdo a datos presentados por la agencia europea de vigilancia de fronteras Frontex, entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de 2015, entraron a territorio europeo más de 710 mil migrantes.

Gulistan de 6 años, en Suruc (Turquía). Echa de menos la almohada que tenía en Kobane. Algunas veces se echa con su madre y la utiliza como almohada. 

En el pasado mes de septiembre, el Gobierno de Turquía ofreció a la Unión Europea cooperación para enfrentar la crisis de refugiados por medio de la contención de los flujos hacia Europa, a cambio de facilidades para obtener una visa. La medida sugiere implementar la creación de una zona de contención en Siria, en la frontera con Turquía.

Mahdi de 1 y medio, en Horgos (Serbia), solo ha vivido la guerra y la huida. 

De acuerdo a Naciones Unidas, la guerra en Siria ha dejado más de 200 mil muertos, así como cuantiosos daños a la infraestructura y economía del país, que tardaría cerca de 30 años en reponerse.

Mohammed de 13 años, en un hospital de Nizip (Turquía), "La cosa más extraña de la guerra es que te acostumbras a sentirte asustado. Nunca lo habría creído", manifiesta Mohammed. Le encantan las casas, en su Alepo natal solía disfrutar caminando por la ciudad para observarla, su sueño es convertirse en arquitecto. 

Sólo el pasado mes de octubre se registró la cifra histórica de 218 mil refugiados hacia Europa, números que superaron la cantidad total de personas desplazadas de manera forzada durante todo el 2014.

Tamam de 5 años, en Azraq (Jordania). Tiene miedo de su almohada y llora todas las noches a la hora de dormir. 

En la actualidad se encuentran registrados más de 230 mil iraquíes en Siria y 47 mil en Jordania. Mientras en Turquía, la cantidad de refugiados iraquíes registrados supera los 120 mil.

Lamar de 5 años, en Horgos (Serbia), en su casa de Bagdad dejó las muñecas, el tren de juguete y la pelota. La bomba lo cambió todo, la familia se dirigía a comprar comida cuando cayó cerca de su casa. 

El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, señaló que la crisis de refugiados, que ha obligado a más de 60 millones de personas a salir de sus naciones de origen, "carece de solidaridad global".

Shiraz de 9 años, en Suruc (Turquía), tenía tres meses cuando sufrió una fiebre severa, el doctor le diagnosticó polio. 

En agosto de 2014 ACNUR llevó a cabo un ejercicio de elaboración de perfiles entre más de dos mil 500 iraquíes que llegaron a Turquía. Casi la mitad de los entrevistados dijeron que habían escapado de los ataques del autodenominado Estado Islámico y un 20 por ciento dijo que habían huido por temor a ataques de ese mismo grupo.

Juliana de 2 años, en Horgos (Serbia) su familia estuvo caminando por Serbia durante dos días. 

El presidente de Hungría, János Áder, ha desplegado fuerzas policiales y militares para detener el flujo migratorio, hecho que termina en distintas oportunidades con acciones violentas contra los desplazados.

Fatima de 9 años, en Norberg (Suecia), todas las noches sueña que se cae de un barco. Junto a su madre, Malaki, y a sus dos hermanas, estuvo dos años en un campo de refugiados libanés. 

Durante las últimas semanas, más de 10 mil personas buscan refugio en Suecia, según un comunicado publicado por el Servicio Migratorio de ese país.

De esa cifra, cuatro mil 333 afganos solicitaron refugio, seguido de dos mil 719 sirios. El gobierno sueco informó que cerrará sus fronteras durante 10 días tras considerar que los refugiados "amenazan" al orden público.

Moyad de 5 años, en Ammán (Jordania), cuando fue rescatado tenía una metralla incrustada en la cabeza, la espalda y la pelvis. Su madre murió cuando iban a comprar harina al mercado, pasaron frente a un taxi que tenía una bomba. 

La proporción de refugiados provenientes de Siria en Grecia es del 69 por ciento del total, seguidos por los afganos (20 por ciento) y los iraquíes (3 por ciento). Otra parte de los sirios se encuentran en el campo de refugiados de Zaatari en Jordania, el segundo más grande del mundo detrás del de Dabab en Kenia.

Sham de 1 año, en Horgos (Serbia). Croacia y Hungría son los países que mayor oposición han mostrado para recibir refugiados. 

De hecho, las autoridades húngaras han redoblado sus controles de seguridad para frenar el flujo migratorio a tal punto que se han construido muros alambrados para impedir el paso de los desplazados.

Esra de 11 años, Esma, 8 años, y Sidra, 6 años, en Majdal Anjar (Líbano), se encuentra con su madre, su padre está desaparecido tras ser secuestrado, "A menudo sueño con que papá me trae caramelos". 

Unos 7,6 millones de desplazados se movilizan dentro del territorio sirio, según las Naciones Unidas. Pero al menos cuatro millones han huido de los combates desde 2011 a países vecinos como Jordania, Líbano y Turquía, destaca el organismo internacional.

Abdul Karim de 17 años, en Atenas (Grecia), pasa la noche en la plaza Omonia, ya que con los últimos euros que le quedaban se compró un boleto para el transbordador con destino a esa ciudad. 

Cuenta que pide prestado un celular para llamar a su madre, que se encuentra en Siria, pero no es capaz de decirle que la cosa va mal. "Sueño dos cosas: con dormir en una cama de nuevo y con abrazar a mi hermana pequeña". 

La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) destacó el 20 de octubre que el número de refugiados que han arribado a Grecia por mar durante 2015 superó el medio millón, mientras que el total de llegadas en Europa a través del Mediterráneo se ubica en 643 mil.