LA LEY MUNICIPAL DE ANIMALES DE COMPAÑÍA AÚN CARECE DE REGLAMENTO

Según la Ley Municipal 239, la reglamentación debía estar en tres meses, sin embargo ya pasó más de un año.

Por Arnold Guachalla L.

El 23 de mayo de 2017, el alcalde de La Paz, Luis Revilla, promulgó la Ley Municipal 239 para animales de compañía en medio del festejo y la satisfacción de los amantes de las mascotas, sin embargo, a un año de este evento aún no fue reglamentada la norma.

¿A qué se debe? ¿Quién es el responsable? ¿Es la irresponsabilidad de las autoridades municipales o reglamentar una ley es muy complicado? Las respuestas las conoceremos en este reportaje elaborado por ANF en base a la versión del municipio paceño y la opinión de organizaciones protectoras de los animales.

      UN POCO DEL CONTEXTO...

Un perro rescatado de la calle y que se aloja en el albergue transitorio de la organización SAVA Bolivia.   Foto ANF.

Según la disposición final segunda de la Ley Municipal 239 para animales de compañía:

La Ley fue promulgada, como ya se dijo antes, el 23 de mayo de 2017 y el reglamento debería estar elaborado y aprobado hasta el 23 de agosto del mismo año. Pero la realidad es otra porque ya pasó un año desde la promulgación y nueve meses desde que el reglamento debía entrar en vigencia. 

La Ley cuenta con 63 artículos, tres disposiciones transitorias, dos disposiciones adicionales y una disposición derogatoria. Toda la norma se basa en tres pilares fundamentales: la salud pública, la protección y responsabilidad con los animales y la planificación urbana. 


Ahora bien, los puntos principales que busca alcanzar esta ley son:

Ante la falta de reglamentación, buena parte de estos puntos aún no son una realidad. Tal es el caso del registro obligatorio de animales de compañía, la conformación de la red municipal de organizaciones protectoras de animales, entre otros.

Esto ha generado preocupación en la ciudadanía y en especial entre las organizaciones dedicadas al rescate y cuidado de animales en condición de calle, que advierten que el municipio paceño estaría incumpliendo su labor designada por la Constitución Política del Estado (CPE).

ALCALDÍA: NO PASARÁ UN AÑO PARA TENER EL REGLAMENTO

Frontis del Palacio Consistorial de La Paz.   Foto: GAMLP 

Según la Secretaría de Salud Integral y Deportes del Gobierno Autónomo Municipal de La Paz (GAMPL), instancia que tiene la responsabilidad de elaborar el reglamento, el trabajo no es tan sencillo y muchos factores han evitado cumplir con el plazo establecido. 

Pero"tampoco va a pasar un año, tampoco seis meses. Surgieron nuevos temas. Tuvimos una última reunión y ahí vimos que hay que volver a revisar (el reglamento) porque cambias algo y vuelves a trabajar" , indicó Glenda Ayala, jefa de la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis de la alcaldía de La Paz.

Según Javier Rodríguez, asesor legal de esta instancia, el municipio paceño es consciente de la preocupación que genera en la población la falta de la reglamentación, pero "esta norma incluye varios aspectos, no solamente técnicos sino también sociales y legales", lo que hace un trabajo complejo.

"Dentro del proceso de reglamentación se han ido identificando varios actores que tienen que ser parte de esta reglamentación, entre ellas las unidades organizacionales del Gobierno Municipal de La Paz, las organizaciones animalistas, Colegio de Veterinarios y veterinarios independientes", dijo a ANF.

El jurista argumentó que debido a la necesidad de tener las observaciones y desarrollar un trabajo que incluya a los mencionados "actores" es que fue inevitable que se supere el plazo para elaborar la reglamentación.

"También se han identificando varios otros temas que no están dentro de la ley 239 y que ahora están incluidos dentro del reglamento", agregó.

Rodríguez enfatizó que la Secretaría de Salud Integral y Deportes "en ningún momento incumplió con su labor de reglamentar la ley 239", pese a que se superó el plazo establecido, y que prueba de ello es que existe un reglamento acabado que debe ingresar por varias instancias antes de su aprobación final por el alcalde de La Paz.

¿POR QUÉ SE PUSO UN PLAZO DE 90 DÍAS PARA REGLAMENTAR UNA LEY QUE SE MOSTRÓ COMPLEJA?


Trabajo de socialización de la reglamentación

Una de las actividades de la Secretaría de Salud Integral y Deportes dentro del proceso de reglamentación fue el envío del documento a distintas organizaciones de protección animal e instituciones de profesionales veterinarios para que puedan leer y emitir sus críticas u observaciones.

Según Glenda Ayala, jefa de la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis de la comuna paceña, se envió el reglamento por correo a cinco organizaciones animalistas para que puedan hacer sus observaciones y sólo una de ellas hizo sus críticas.

"Muchas organizaciones no han contestado, otras han solicitado que primero se acabe con el documento para hacer las observaciones correspondientes. Hasta ahí se llegó con muchas organizaciones animalistas, lamentablemente no todas han podido o no quisieron aportar en su momento", afirmó Ayala.


¿SIN REGLAMENTO NO entra EN VIgor LA LEY 239?

De acuerdo a Ayala, la falta de un reglamento no hace que la ley 239 no sea puesta en vigor, ya que hay actividades que sí se ponen en práctica.

"Zoonosis no acude a socorrer animales a simple llamada telefónica..."

Ante denuncias de que Zoonosis de la alcaldía de La Paz no acudía al rescate de perros maltratados pese a llamadas constantes, Ayala aclaró que su repartición no atiende este tipo de casos a simple llamada telefónica.

"El área de Zoonosis no recibe denuncias a simple voz o por vía telefónica, porque a veces son denuncias ficticias y nos hacen ir en vano", aseguró. 

La funcionaria explicó que una denuncia formal se hace mediante una nota que debe ser presentada ante las oficinas de la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis, instancia que luego visitará el domicilio donde se generó el acto de violencia contra animales de compañía y citará al infractor para evaluar la situación.

Las limitaciones de Zoonosis

Ayala indicó que fuera del trabajo de zoonosis y vigilancia epidemiológica, la Unidad de Salud Integral de Animales y Zoonosis efectúa el control de focos con la detección de algún caso de rabia canina, entre otros temas, y ello complica su labor tomando en cuenta que también reciben las denuncias de maltrato animal.   

Ante esta situación, se consultó a la funcionaria si el problema se resolvería con el incremento de personal. La respuesta fue negativa, ya que desde su perspectiva "el problema es de la gente" y no de la Alcaldía, por eso con la Ley Municipal 239 "se quiere mostrar que todos somos responsables por los animales que tenemos en la calle".

"No es el problema del Gobierno Municipal de La Paz, es un problema de los vecinos, si soy responsable no abandono a mi animal, no lo expongo a que lo maltraten en las calles o sufra algún atropello. Si la gente fuera responsable no tendríamos animales en la calle, no tendríamos abandonos ni problemas de rabia", agregó.

Asimismo, la autoridad aclaró que en la Ley Municipal 239 se especifica hasta qué punto una persona puede hacer algo por los animales de compañía, al igual que el alcance que tiene el muncipio paceño para actuar.

"Cuando se tenga el reglamento va a quedar mas claro a qué nos referimos", aseguró.

¿LAS ORGANIZACIONES ANIMALISTAS TIENEN COMPETENCIAS SOBRE LOS ANIMALES EN CONDICIÓN DE CALLE A PARTIR DE LA REGLAMENTACIÓN?


La Secretaria Municipal de Salud Integral y Deportes, Verónica Hurtado, afirmó que la ayuda de las organizaciones animalistas es vital.

"Necesitamos que estas organizaciones estén legalmente establecidas para que haya una relación de ayuda. En este caso haríamos un convenio donde designemos labores porque vamos a ser parte de un solo trabajo", destacó

Asimismo, Hurtado señaló que hasta los activistas que sean independientes podrían colaborar para denunciar casos de maltrato animal y rescates, llegando a constituirse en "la voz de la calle porque ellos estarán donde nosotros no vamos a poder llegar porque no podemos controlar todo".

ANIMALES SOS: LA ALCALDÍA INCUMPLE LA FUNCIÓN PÚBLICA

Susana Carpio, representante de la organización Animales SOS.  Foto: ANF

Para la activista y representante de la organización ANIMALES SOS, Susana Carpio, la inexistencia de un reglamento de la Ley Municipal 239 es un pretexto de la Alcaldía y su Unidad de Salud integral de Animales y Zoonosis para no atender a los animales domésticos que sufren abuso, violencia o enfermedades en las calles de la ciudad.  

Según Carpio, cuando hay un caso flagrante de abuso de animales domésticos y es notificado a la denominada Casa de la Mascota o al Zoonosis del municipio, estas instancias sólo delegan la responsabilidad a la Policía Forestal y de Medio Ambiente (Pofoma). 

"Así los funcionarios de la Alcaldía están derivando la función pública , no se lo puede dar a un particular y menos a la Policía porque ésta tiene funciones específicas y están detalladas dentro de la Constitución Política del Estado", manifestó.

"LA ALCALDÍA PUEDE REGLAMENTAR SIN LA NECESIDAD DE CONSULTAR A LAS ORGANIZACIONES ANIMALISTAS..."

Carpio explicó que el municipio paceño tiene la obligación de trabajar la reglamentación de la Ley sin la necesidad de consultar a las organizaciones protectoras de animales, dada la responsabilidad exclusiva que esta repartición tiene. 

"La competencia exclusiva de la protección animal es del municipio, no es mía, no es de una organización animalista de Facebook, tampoco de una activista independiente porque todas las organizaciones legales, como la que yo dirijo, e ilegales no tienen responsabilidad en ninguna reglamentación", aseveró.

Carpio contó que desde el 2017 envió continuas cartas reclamando por la inexistencia del reglamento, sin embargo, nunca obtuvo respuesta a sus misivas por lo que tuvo que llegar personalmente hasta la Alcaldía.

"Mandé otra carta preguntando ¿Quién se va a hacer cargo de los perros con rabia y en condición de calle o de los casos de crueldad? Esto necesita una respuesta. Hoy llamas a la Alcaldía y solo hay pretextos, no hay respuesta", indicó.

Finalmente, según Carpio, lo único que queda es seguir denunciando los casos de maltrato animal o de rabia canina ante el municipio paceño para que esta instancia cumpla sus competencias.