EL TRABAJADOR BOLIVIANO

Diagnóstico de la situación laboral en el país

Este 1 de mayo se celebra el Día internacional del Trabajo, que rinde homenaje a los mártires de Chicago que fueron ajusticiados por su participación en las jornadas de lucha por conseguir la jornada laboral de ocho horas. 

Este año el festejo en Bolivia viene acompañado de un largo feriado, debido a que el 1 de mayo cayó en domingo y el día festivo se trasladó a lunes, por lo que el país retomará sus actividades normales recién el segundo día del mes.

Pero más allá de los festejos,  ¿cómo se encuentra la situación del trabajador boliviano en la actualidad? 

¿Cuánta gente trabaja en Bolivia?

Según los datos del Censo Nacional de Población y Vivienda de 2012, en Bolivia aproximadamente 7 de cada 10 bolivianos están en edad de trabajar, de esos 7 solo 4 pertenecen a la Población Económicamente Activa (PEA) y los restantes 3 no tienen empleo. En cifras totales esto significa 4.739.203 ciudadanos ocupados 3.219.398 que afirmaron no tener una actividad laboral.

Las personas "no activas" son aquellas que si bien está en la edad de trabajar al momento de ser consultados no tenían trabajo, no lo habían buscado o no deseaban trabajar. Dentro de este grupo se encuentran las amas de casa, los estudiantes, los rentistas y los jubilados.

Según los mismos datos, elaborados y difundidos por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), de esos más de 4 millones de bolivianos que gozan de una ocupación laboral, el 50,6% no cuenta con un ingreso fijo y trabaja por cuenta propia; mientras que el 41,5% es asalariado.

Esto significa que más de la mitad de los bolivianos que tienen una ocupación no goza de un de salario fijo que le garantiza beneficios sociales como la jubilación, el seguro de salud, aguinaldo o vacaciones. 

De acuerdo a la actividad económica, la población ocupada está principalmente representada en la Agricultura, Ganadería, Caza, Pesca, además de la Venta por mayor y menor, así como en la Construcción, Transporte y Educación.

Santa Cruz es el departamento con mayor número de asalariados con el 52,5%, mientras que Potosí tiene la mayor población de trabajadores por cuenta propia, el 60,9%.

El desempleo y el empleo precario

En el ultimo informe a la nación, el pasado 22 de enero, el presidente Evo Morales afirmó que la tasa de desempleo en Bolivia bajó de 8,2% en 2005, a 3,2% en 2015. Según este indicador solo 3 de cada 100 bolivianos no tendrían empleo en el país.

Estas cifras son menores a las que señalan estudios independientes. Según datos del Centro de Estudios para el Desarrollo Laboral y Agrario (Cedla) solo en las ciudades del eje troncal del país (La Paz, Cochabamba y Santa Cruz), en las que vive la mayoría de la población activa, la tasa de desempleo es del 7.9%, es decir, más del doble que señala el informe gubernamental.

El Cedla además asegura que el 65% del empleo es informal, es decir que no está regulado por la Ley General del Trabajo, no tiene salario fijo ni beneficios laborales, y solo un 35% sí está en el sector asalariado.

Empleo precario

Según el Cedla, una de las explicaciones a la reducción del desempleo en Bolivia en los últimos años tiene que ver precisamente con el fenómeno del trabajo precario. Las personas desempleadas aceptaron trabajos en condiciones de inestabilidad laboral, ingresos por debajo de los establecidos en la ley y sin seguridad social, fundamentalmente en el sector informal, el sector terciario y puestos de baja calificación.

Datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), publicados en 2013, señalan que el 56% de los obreros y empleados del país no tenían hasta ese año seguro de salud y 51% no estaban afiliados a las AFP. Más de la mitad del total de la población ocupada. 

Pero, quiénes más sufren de las pésimas condiciones laborales son los jóvenes, que son los que al final son en su mayoría los que deben aceptar el empleo precario. 

Jóvenes y el mercado laboral

Según datos del Ministerio de Trabajo, divulgados en diciembre de 2014, entre 70.000 a 80.000 jóvenes estaban sin empleo en Bolivia hasta esa fecha. Esta cifra equivale a más de la mitad de las personas que se encuentran sin una fuente laboral en Bolivia, según información de este despacho.

El indicador de desempleo en los jóvenes es del 8.1%, 5 puntos por encima de la cifra nacional, que es de 3,2%.

La falta de experiencia laboral es el principal obstáculo con el que se encuentran los jóvenes. La necesidad de adquirir un trabajo que genere ingresos los lleva a aceptar trabajos precarios, con salarios bajos y con contratos inestables.

Según una investigación de la Fundación para el Periodismo de los 170.000 estudiantes universitarios que se titulan cada año a nivel nacional solamente el 53% encuentra un empleo, mientras que el 47% termina desempleado, subempleado o creando un negocio propio por falta de alternativas. 

Esta misma investigación señala que de los 120.000 jóvenes bolivianos que ingresan al mercado laboral el 88% se encuentra con un empleo precario, inestable, sin seguridad social y con un ingreso bajo.

Desigualdad laboral de género

Otro aspecto fundamental es la situación laboral de la mujer. Según datos del Censo 2012, el 49,4% de la Población Económicamente Activa (PEA) es femenina, es decir que existe casi una paridad entre ocupados hombres y mujeres.

En 11 años, la participación de las mujeres en el mercado laboral se incrementó en 1,9 puntos porcentuales de 39,9% en 2001 a 41,8% en 2012, de acuerdo al último Censo.

Sin embargo, la situación es mucho más desigual en el caso de la población "no activa", en este indicador el 62,9% es mujer, es decir no tiene trabajo. Más de un millón y medio, en cifras generales. 

La desigualdad también se presenta en el aspecto salarial. Datos del Cedla afirman que los hombres reciben el 67% de la masa global de ingresos del trabajo; en cambio, las mujeres solamente se apropian del 32% de la masa global de ingresos.

En el caso del subempleo. En el 2010, 69 de cada 100 mujeres ocupadas se desempeñaban en empleos informales en comparación a 59 de cada 100 hombres. En muchos casos, a pesar de tener un mayor nivel de instrucción, las mujeres seguían ocupando más empleos precarios en comparación con los varones.

Dadas las dificultades para encontrar empleo, las mujeres suelen conseguir empleo en los rubros mal remunerados, en los grupos ocupacionales con predominancia de trabajos no calificados, de servicios y vendedores donde el porcentaje de participación de mujeres trabajadoras supera por un gran margen a la de los hombres. En el sector de comercio al por mayor y menor según datos del Censo 2012, trabaja el 27,1% de mujeres y solamente 12,1% de hombres.

El nivel salarial en Bolivia

El salario mínimo nacional subirá este 2016 a 1.805 bolivianos (259 dólares), que aún está por debajo del promedio de América Latina que es de 354 dólares. 

En comparación, Bolivia está por encima de países como Colombia (229 dólares) y Perú (252 dólares), pero lejos de Chile dónde el salario mínimo es de 373 dólares o Argentina (413 dolares).

Panamá no solo es el país de Centroamérica donde se percibe el salario mínimo más alto (677 dólares en la región uno y 529 dólares en la región dos), sino también en toda Latinoamérica, de acuerdo a la información comparativa.

Según datos del Gobierno, en la última década, de enero de 2006 a enero de 2016, el salario mínimo aumentó en 273%. Hace diez años estaba fijado en 440 bolivianos. Mientras que el poder adquisitivo creció 79% en los 10 años de su gestión y el incremento salarial (al básico) acumulado llegó a 143%.

¿Es suficiente el salario mínimo para subsistir?

Para saber si el salario de un trabajador es suficiente, el Cedla utiliza el indicador de la Canasta Normativa Alimentaria. Este indicador, que no es oficial, se calcula en base al índice de los precios de alimentos ajustado por la tasa de inflación anual y el costo de alimentar a una familia de cuatro personas. 

Según estos cálculos del Cedla a finales de 2015 la CNA estaba en 2.331 bolivianos, por debajo del salario mínimo nacional, incluso con el reciente incremento. 

¿Dónde se gana más en Bolivia?

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, a marzo de 2015, en el caso de los empleos formales del sector privado, la actividad económica con mejores salarios es el de la Producción y Distribución de Electricidad, Gas y Agua con un promedio mensual de 8.351 bolivianos, seguido por el de Comunicaciones, con un promedio de 7.071 bolivianos. Mientras que en el área de Bares y Cantinas el salario tiene el promedio más bajo con 1.840 bolivianos.  

Texto y composición: Christopher André Díaz

Fuentes: INE,  Ministerio de Trabajo, Cedla, Fundación para el Periodismo

Fotos: Archivo fotográfico EL DEBER, Nati Bainotti

Email: candre@eldeber.com.bo