El zinc, la perla del sistema inmune 

Un mineral imprescindible para nuestras defensas y muy abundante en ostras y carne roja

Estamos en época de frío, de catarros y de gripes. En estos días, toses y estornudos son la banda sonora de cines y medios de transporte, y los anuncios de vitaminas y medicamentos contra el resfriado inundan la televisión. Cuando vi que uno de estos conocidos productos contiene ahora zinc, recordé una larga infección de garganta que tuve la primavera pasada. Tras dos tandas de antibióticos que no habían conseguido curar la infección, el médico decidió hacerme análisis más específicos. Mientras esperábamos los resultados, me recomendó tomar un suplemento de zinc para fortalecer las defensas. No pude evitar preguntarme por qué. ¿Cómo mejora las defensas la ingesta de zinc? ¿Qué papel juega en nuestro organismo y en el sistema inmune?

El zinc es un oligoelemento esencial para la vida. Durante el embarazo, la lactancia y la niñez, el zinc es fundamental para el crecimiento y el desarrollo. Con una cantidad de entre 2 y 4 gramos distribuidos por todo el cuerpo, es el segundo elemento más abundante en nuestro organismo, solo superado por el hierro. Se ha comprobado que cuando se toman suplementos de zinc durante al menos cinco meses, éste puede proteger frente al catarro común. Y si se empieza a tomar 24h después de que comiencen los primeros síntomas, hace que estos sean menos intensos.

El zinc como mensajero celular

Es un mineral necesario para el crecimiento, la diferenciación y la supervivencia celular, ya que participa en muchas funciones biológicas, como el metabolismo de proteínas y de ácidos nucleicos. Activa cientos de enzimas y puede actuar como agente antioxidante y antiinflamatorio. Recientemente se ha demostrado que un incremento de zinc en la dieta reduce el estrés oxidativo y el daño en el ADN. Además de su importancia en el sistema inmune, también juega un importante papel en el sistema nervioso. Aunque desde hace años se sabe que deficiencias de zinc disminuyen la respuesta inmune, el mecanismo exacto por el que el zinc regula esta respuesta no está muy claro. 

"Una de las razones por las que el zinc tiene tanta importancia en el sistema inmunitario es porque forma parte de la estructura de muchas proteínas. Sin embargo, existen evidencias que muestran cómo el zinc, al igual que el calcio, juega un papel como mensajero celular", afirma Rubén Vicente García, investigador del Parc de Recerca Biomédica de Barcelona y especializado en el estudio del zinc en el sistema inmune.

Un mensajero celular es una molécula que permite la comunicación entre células. El mensajero activa un receptor en la superficie de la célula y este receptor altera otras moléculas del interior celular creando una respuesta específica. Aunque el mecanismo exacto todavía no se conoce completamente, los estudios más recientes indican que es así como el zinc regula el sistema inmune.

El aporte de zinc proviene de la leche materna o del alimento. Este micronutriente pasa del intestino al torrente sanguíneo gracias a unas moléculas llamadas “transportadores de zinc”. Una vez en la sangre, es distribuido al resto del organismo, y de nuevo estos transportadores se encargan de incorporarlo a las células. Una alteración en cualquiera de estos pasos o una dieta baja en este mineral causará deficiencias en zinc y una patología.

En su justa medida

El defecto de zinc en el organismo origina infecciones recurrentes, problemas cognitivos, crecimiento lento, hipogonadismo, anorexia e inapetencia, pérdida de cabello y problemas de piel, mala cicatrización y alteraciones de los sentidos del gusto y del olfato.

Sin embargo, tampoco se puede abusar de los suplementos de zinc, ya que en grandes cantidades puede causar diarrea, cólicos abdominales y vómitos. Además un exceso de zinc puede interferir en la absorción de otros minerales y originar una deficiencia de cobre o hierro.

Las ostras, la mayor fuente de zinc

El zinc es muy abundante en ostras

Es muy importante seguir una dieta equilibrada que aporte a nuestro organismo la cantidad necesaria de zinc. Las proteínas animales son una buena fuente de este mineral. Es muy abundante en la carne de res, de cordero y de ave, y también en mariscos como el cangrejo y la langosta. Sin embargo, el alimento que mayor cantidad de zinc contiene son las ostras: media docena aporta el 220% de la cantidad diaria recomendada.

Aunque está muy presente en nueces, legumbres y cereales, el zinc proveniente de estos alimentos se absorbe peor. Esto se debe al fitato, una molécula presente en muchas plantas. El fitato se une con gran afinidad al zinc y a otros minerales, y como el intestino humano no es capaz de digerirlo, nuestro cuerpo desecha y no absorbe los minerales unidos a este compuesto.

De esta forma, una dieta rica en fibra y en fitatos puede contribuir a una mala absorción de zinc, aunque su ingesta sea la adecuada. Por ello, la cantidad recomendada diaria de zinc debe ajustarse en todas aquellas dietas bajas en productos de origen animal y altas en productos de origen vegetal, que aunque sean ricas en zinc, también son ricas en fitatos.

Alimentos ricos en zinc


Un millón de muertes al año por déficit de zinc

Según la Organización Mundial de la Salud la malnutrición continúa siendo un problema grave en muchos países en desarrollo, y afecta sobre todo a mujeres y niños. Una dieta baja en proteínas y energía acarrea importantes problemas de salud, generalmente causados por falta de micronutrientes, en especial yodo, hierro, vitamina A y zinc.

Se calcula que un tercio de la población mundial tiene deficiencias de zinc y este defecto llega a causar hasta un millón de muertes al año. Esta deficiencia está muy distribuida por áreas. Se producen en individuos y poblaciones con dietas bajas en carnes rojas y altas en cereales que son ricos en fibras y fitatos. Las dietas pobres en zinc se descubrieron hace unos treinta años entre poblaciones pobres de Oriente Medio. Es frecuente en mujeres embarazadas y niños y adolescentes de Egipto, Irán, Turquía, China, y también en países como Canadá, Estados Unidos y Australia

Paloma Goñi Oliver