Afrovenezolanidad, la reivindicación de una identidad

El "negro", como menciona el historiador Federico Brito Figueroa, se ha concebido dentro de la mayoría de los discursos académicos, entre ellos el histórico, como “masa popular” (1961) y no como agente histórico culturalmente diferenciado; las luchas contemporáneas de los y las afrodescendientes de nuestro país recibieron su reconocimiento en el discurso del Comandante Chávez, quien precisamente, para reivindicar a los afrodescendientes de Venezuela, en el año 2004 creó la Comisión Presidencial contra la Discriminación Racial.

"Trajeron a los hermanos negros del África, los trajeron amarrados y esclavos. Luego fueron echando raíces en esta tierra, hasta que llego la independencia, llego la revolución llego la Guerra Federal se hicieron libres y hoy en esta tierra vive una importante población de afrodescendientes"   Cmdte. Hugo Chávez

Fue un año después, en 2005, cuando activistas que luchan por el reconocimiento de la cultura e historia africana en Venezuela, propusieron el 10 de mayo, fecha de la insurrección de José Leonardo Chirino, como día para la conmemoración de la Afrovenezolanidad, proyecto que fue impulsado por el actual presidente de la República, Nicolás Maduro, entonces presidente de la Asamblea Nacional. A esto le siguió la instalación del Consejo Nacional para el Desarrollo de las Comunidades Afrodescendientes, la promulgación de la Ley Contra la Discriminación Racial (2011) y la creación del Instituto Contra la Discriminación Racial (Incodir).

En la última década el movimiento afrovenezolano ha logrado tener cabida en todos los escenarios, debido a la apertura del sistema participativo y protagónico que impera actualmente donde la palabra afrodescendiente es bandera de la pertenencia a un acervo cultural y gastronómico.

CULTURA DE RESISTENCIA

Una nueva construcción social nacida de los que nunca olvidaron sus raíces

La diversidad cultural afrovenezolana es el resultado de las expresiones musicales, artísticas, culinarias, religiosas, históricas, que las distintas civilizaciones africanas trajeron en su memoria desde las tierras ancestrales de las que fueron secuestrados, tradiciones que lograron conservar a través de un largo proceso de cultura de resistencia.

Esa cultura ancestral supo complementarse con otras expresiones culturales como las aborígenes y las hispanoárabes para dar surgimiento a nuevas manifestaciones culturales en una especie de "creatividad cultural".

ETAPAS DE LA CULTURA DE RESISTENCIA

1. Preservación cultural de los códigos distintivos originales.

Ante la imposición de la cultura occidental los africanos resguardaron sus expresiones y tradiciones originales y las diferentes muestras de tambores de percusión existentes a lo largo de la costa de Venezuela así lo evidencian. La preparación de algunos alimentos como la Cafunga de Barlovento, las construcciones de las casas, palabras como Malembe, Birongo, Carabali, Zambe, y las técnicas agrícolas son una muestra de la continuidad cultural africana en Venezuela.

1. Nacimiento de la interculturalidad

Nace una creación cultural formulada en la construcción de expresiones culturales al mezclarse voluntaria o involuntariamente con las culturas hispano-árabe o aborígenes. De allí, surgen las fiestas religiosas afrocatólicas como San Juan, San Benito, San Pedro, San Antonio, Diablos Danzantes de Venezuela, etc.

3. Innovación cultural

Surgiendo de las expresiones originales y recociendo la africanía como punto de partida, las expresiones culturales transmutaron a una nueva forma de recreación influenciada por las costumbres africanas y son hoy la base de nuestra tradición. 

Las expresiones culturales que se producen en las comunidades afrodescendientes de Venezuela se registran en los cultos de mayo propios de los velorios, en las fiestas del período de las lluvias, equivalente a las del solsticio de verano europeo, dedicadas a San Juan Bautistas, San Pedro, San Antonio y en las del período navideño, específicamente las del culto a San Benito. Igualmente el tambor guarir del sur del lago de Maracaibo, el golpe veleño de Falcón, con sus influencias antillanas, los tambores de Yaguaraparo de Sucre, el estribillo oriental, el Calipso de Sucre y Bolívar, los rituales mortuorios como La Maluca y otras ceremonias similares, el paloteo y su teatro de calle, el San Pedro de Guatire, los juegos y rituales de iniciación, las adivinanzas, los autos sacramentales de diversas regiones mulatas, entre otras Gibraltar (estado Zulia), Chuao (estado Aragua) y Borburata ( estado Carabobo), y manifestaciones del teatro popular ( los tambos negros de Barlovento, estado Miranda), los conjuros y oraciones, las palabras que muestran un posible origen africano: bemba, bimba, birongo, bongo, cumbe, changó, ganga, guaricongo, malembe, quimbombó, etc.

La obvia herencia africana en la utilización de distintos instrumentos de trabajo como el azadón o el pilón, en la implementación en la culinaria criolla de técnicas como el sofrito o el predominio de la grasa en salsas y guisos, en la preparación de alimentos como la mazamorra (maíz con papelón y leche) o el funche (maíz molido con manteca y sal) y tanta otras formas de creación popular propias de poblaciones negroafricanas de Venezuela, constituyen un importante legado cultural de África negra a nuestro país.

Relaboración del discurso autentico y reivindicativo de la herencia africana

La movilización política que hoy se da en los distintos movimientos sociales afrodescendientes tuvo su auge revolucionario con la rebelión popular del 27 de febrero de 1989. La crisis que vivió la sociedad venezolana también tuvo como protagonistas los incipientes actores sociales dentro de las comunidades afrovenezolanas. La lucha por la tierra en los Cañizos-Palo quemao, la pelea por el ambiente en Carenero, la resistencia cultural en San Agustín, la revisión curricular de la política educativa para visibilizar la perspectiva afrovenezolana, la reivindicación de José Leonardo Chirino en la Sierra de Coro por su pueblo Falconiano, el nacimiento de la Unión de Mujeres Negras, la irrupción de la Fundación Afroamerica como nuevo paradigma y reelaboración conceptual del tema o la creación de la Sociedad Venezolana de Diablos Danzantes.

Con la llegada del Presidente Chávez se abrió por primera vez el espacio para que las organizaciones sociales de base pudieran dialogar de frente con el Estado, fue con el proyecto político que inició a finales del siglo XX que se abrieron los espacios de participación y se incorporaron tanto colectivos como individualidades afrodescendientes en la defensa de sus derechos como ciudadanos. La Constitución Nacional aprobada en 1999 establece la condición multiétnica y pluricultural de la República Bolivariana de Venezuela, de lo cual surge un proceso socialitario, humanista, democrático e incluyente que da el traste con toda esa pesada y nefasta carga de injusticia y esclavitud que pesaba sobre la afrodescendencia. 

Desde el año 2001 se reivindicó a los herederos africanos en sus distintas condiciones. Este es un acuerdo mundial de la tercera conferencia contra el racismo. Venezuela es miembro de esta conferencia y suscribió los acuerdos de incluir a su población afrovenezolana"