La fachada sobria y elegante ocupa todo el frente de la manzana, sus dos niveles separados entre sí por una cornisa de argamasa bella y complejamente elaborada, de esta sobresale una portada central enmarcada por jambas de cantera almohadilladas siendo la base de un airoso balcón rematado en un frontón donde se labraron sobre su material de cantera el escudo de las armas del Rey Don Fernando VI, el Escudo de Puebla de los Ángeles.

Es un edificio de gruesos muros e planta oval terminando en rudimentarias almenas, un diseño, que lograba espacios para ser usados con su base de arcos como unos palcos, este edificio de cuatro niveles que cuenta con sus respectivos corredores de distribución, situándose en su funcionalismo a nivel mundial integrando a sus dobles vestíbulos y una sala de descanso en la segunda planta.