Cada rincón se hace especial cuando una flor rompe en la arquitectura de los espacios. Una mesa presidencial salpicada del color de las flores, una entrada singular con detalles verdes o una fuente de agua salpicada de pétalos de rosa hace que esos espacios se personalicen con la esencia de los novios y sea el reflejo de su historia de amor.
Realzando la belleza de la novia
La ceremonia en cada momento tiene su particularidad y decoración
Rincones...
Zona de celebración...
El seating es lugar donde damos la bienvenida a los invitados. Donde encuentran su lugar y una forma de agradecerles su acompañamiento este día.
La singularidad, la sencillez y la elegancia en cualquier lugar, en cualquier rincón hacen cada boda especial y única, como los son nuestros novios. Historias de amor diferentes y especiales, que irrumpen con fuerza el día de su celebración. Por eso, entendemos que cada una es única y el trabajo así lo demuestra.
La personalización en las bodas es parte de su encanto
Los detalles sí que cuentan, como también importa ese sentimiento que nace entre dos personas y que idealizan el día de su boda. Es importante que cada elemento dote de protagonismo a la ceremonia, que sea el reflejo de una historia de amor.
Restaurante Casino Alemañ y Floristetía Crisálida intentan crear esa conexión, con esa simbiosis entre dos profesionales para ofrecer lo mejor a sus novios. Una boda de ensueño enmarcada en el recuerdo de un día muy especial para todos e inolvidable para muchos.
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