Salvemos los océanos y preservemos la vida

"Por un planeta sin contaminación por plásticos"es el lema de las Naciones Unidas este año para el Día Mundial del Medio Ambiente 

Desde el comienzo de la vida, el océano ha sido uno de los espacios más grandes, misteriosos y diversos en el planeta Tierra. Desafortunadamente, la contaminación creada por los humanos en tierra firme y algunos fenómenos naturales lo están poniendo en peligro. La vida marina está muriendo y como resultado todo el ecosistema oceánico es amenazado por varias fuentes de contaminación.

Antes se asumía que por ser muy grande, vasto y profundo, verter basura en él tendría consecuencias mínimas. Los estudios recientes demuestran que estábamos equivocados. Los cuatro océanos han sido afectados por las actividades humanas durante más de un milenio y la situación se ha agravado en las últimas décadas. El plástico, los desechos tóxicos, los derrames de petróleo y otros factores constituyen fuertes contaminantes.

Diversas entidades internacionales y científicas van advirtiendo al mundo sobre las amenazas que afectan a los mares. Entre ellas, la pesca ilegal no declarada y no reglamentada, las prácticas de pesca destructiva, las especies exóticas invasivas, la contaminación, la degradación de los arrecifes de coral, así como el cambio climático que incide directamente en el aumento de la temperatura de estas aguas y la elevación de su nivel.

Es por ello que el centro de las acciones en 2018 por el Día Mundial del Medio Ambiente se dirigen fundamentalmente a esas grandes masas de agua que ocupan cerca del 70 por ciento del planeta y que son vitales para la existencia de la vida en la Tierra. "Por un planeta sin contaminación por plásticos" es el lema que lanzó Naciones Unidas y que apunta a una de las problemáticas que más afecta hoy a nuestros océanos.

Según cifras de las Naciones Unidas, más de 100 mil especies mueren cada año por el plástico que contamina el mar y en unos 30 años, habrá más plástico que peces en el mar.
Plásticos en el mar
La vida marina se enfrenta a un daño irreparable por las millones de toneladas de desechos plásticos que terminan en los océanos cada año, advirtió Naciones Unidas. Basándose en datos de la revista "Science", científicos de la Universidad de Stanford y de Peking estipulan que han circulado desde los comienzos de la fabricación de este material en la década de 1950, 8 mil 300 millones de toneladas alrededor de la Tierra. Este peso equivaldría a mil millones de elefantes.

En sus pocos decenios de existencia este recurso lo transformó todo, desde la ropa, la cocina y la restauración, hasta el diseño de productos, la ingeniería y el comercio minorista. Una de sus grandes ventajas es que están diseñados para durar mucho tiempo y casi todo el plástico que se ha creado en la actualidad todavía existe de alguna forma. En 2017 se vendieron alrededor de 480 mil millones de botellas de plástico en todo el mundo, es decir, un millón de botellas por minuto.



De toda la cantidad producida, se estima que un 10 por ciento del total acaba en los océanos en forma de basura. De ser real esta estimación, hay 830 millones de toneladas de plásticos en el océano, concretamente de macroplásticos. Del 90 por ciento restante, casi el 80 yace en el medio ambiente y en vertederos y la humanidad apenas recicla el 10 por ciento.


Por otra parte, una investigación llevada a cabo por científicos de las Universidades de Hawái, Western Australia, Ciudad del Cabo y distintas instituciones científicas de Francia, Chile, California y Nueva Zelanda, estimó que la cantidad actual de microplásticos en los mares y océanos del mundo es de 5.25 trillones de partículas, que equivalen a 270 mil toneladas de microplásticos.

De acuerdo a un nuevo informe sobre el futuro de los mares, la cantidad de piezas y micropartículas de plástico en el océano podría triplicarse para el año 2025. Teniendo en cuenta que ya hay más de 5,25 billones de piezas.



Los vertidos de plásticos y sintéticos al mar, provocan la muerte de millones de animales marinos; unas veces porque quedan atrapados por esos vertidos y otras porque lo confunden con comida. La basura plástica se acumula en áreas del océano donde los vientos crean corrientes circulares, conocidas como giros, que absorben cualquier residuo flotante.

Hay cinco giros en todo el mundo, pero el más conocido probablemente es el giro del Pacífico Norte.
Los océanos se vuelven ácidos
La importancia de los océanos en la mitigación del cambio climático es enorme. El dióxido de carbono (CO2) que se emite a la atmósfera es generado totalmente por la actividad humana, el cual se produce en la quema de combustibles fósiles, la deforestación de los bosques, así como los cambios en el uso del suelo de forestal a agrícola. Este gas es el principal responsable del efecto invernadero, ya que permite que ingrese a la atmósfera más radiación solar de la que puede evaporar.

La absorción de los océanos del CO2 produce también efectos no deseados, ya que afecta directamente en la disminución del pH del agua de mar, en los diferentes tipos de océanos que hay en el planeta, lo que convierte sus aguas más ácidas, especialmente en la capa superior de 100 metros.


Este fenómeno perturba la fijación de carbonato de calcio (CaCO3) en los esqueletos o armazones de conchas, provoca el descenso de especies muy sensibles como moluscos, erizos y estrellas de mar y pone en riesgo especies y ecosistemas como los arrecifes de coral, que constituyen la mayor fuente de ingresos y proteína para millones de personas en el mundo, además puede acelerar el cambio climático.


El último informe publicado sobre la acidificación de los océanos ha sido el del Consejo Nacional de Investigación de los Estados Unidos, difundido el 22 de abril pasado, en el que revela que la corrosión y el nivel de acidez en el mar se eleva cada vez más, y a ritmo más rápido que en cientos de miles de años, produciendo graves daños.

Derrames de petróleo. Catástrofe ecológica
El petróleo es la fuente más veloz del deterioro de los océanos, siendo incluso más dañina que los desechos y la basura. Sin embargo, sólo un mínimo porcentaje del petróleo vertido en el océano, cerca del 12 por ciento, es resultado de derrames. Una gran parte proviene del drenaje en tierra firme.

Los derrames de petróleo asfixian la vida marina hasta matarla. También causa modificaciones en el comportamiento y perturbaciones en el aislamiento térmico de los animales. En general, cambia todo el ecosistema del área afectada, ya sea en la costa o en las profundidades.


Los derrames ocurren normalmente en el mar, pues allí están la mayor parte de las plataformas petroleras. La causa generalmente es la negligencia humana y son una forma mayor de contaminación. El crudo puede liberarse desde los tanques hacia la tierra si éstos se rompen o desgastan, o desde las plataformas si hay algún incendio, explosión o avería. Lo que es común a todos los derrames de este combustible fósil, es el daño causado y el largo tiempo que toma reparar el impacto negativo en el medio ambiente.

Cuando el petróleo se derrama, en primer lugar, se acumula en la superficie del agua y evita que la luz solar la atraviese. La sustancia es tan tóxica que puede causar pérdidas masivas de especies que viven en el mar. El petróleo penetra en el plumaje de las aves marinas y deshace las propiedades impermeables de las plumas, lo que las hace más pesadas, les impide volar. Y finalmente las mata de envenenamiento o hipotermia.


Muchos animales jóvenes y aves mueren de inanición, porque sus padres no son capaces de encontrarlos si no logran olerlos. Los pájaros que intentan deshacerse del aceite por sí mismos, muchas veces lo tragan por accidente y mueren de sus efectos tóxicos. En muchos casos, los animales se vuelven ciegos debido a una continua exposición al petróleo. Delfines, nutrias marinas, peces e incontables especies de aves y muchos otros mamíferos marinos enfrentan estas consecuencias. Contabilizar estos efectos y limpiar el petróleo puede tomar desde semanas a años, dependiendo del daño causado.

Algunas consecuencias de la Contaminación del Mar

1- Muerte y falla en el sistema reproductivo de los animales acuáticos

La consecuencia principal de la contaminación de los océanos es que mata a los organismos que dependen de este cuerpo de agua para vivir. El petróleo derramado en el océano se puede meter en las plumas de las aves marinas o en los bronquios de los peces, dificultando su movilidad o su habilidad para alimentarse. Los efectos de los desperdicios tóxicos pueden incluir cáncer, cambios en el comportamiento, fallas en su sistema reproductivo, y la muerte. Los químicos de los pesticidas son especialmente peligrosos ya que pueden acumularse en el tejido de los animales causando fallas en su sistema reproductivo.



2- Interrupción de la cadena alimenticia/efectos en la salud humana

La contaminación causa una interrupción en la cadena alimenticia. Contaminantes como el plomo y el cadmio son ingeridos por animales pequeños. Más adelante, estos son consumidos por peces más grandes y crustáceos, así que la cadena alimenticia continúa siendo afectada en todos los niveles. Los animales que son afectados en esta cadena alimenticia son consumidos por humanos y las toxinas se depositan en los tejidos de las personas. Esto puede causar hepatitis, cáncer, defectos de nacimiento, y problemas de salud a largo plazo.


3- Floración de algas

La contaminación del mar también puede incrementar la frecuencia de la floración de algas. Estos capullos hacen que el oxígeno del agua se agote, por lo que miles de peces mueren sofocados. Los peces también pueden morir cuando una gran cantidad de algas queda atrapada en sus bronquios.


4- Destrucción en los ecosistemas

Los ecosistemas pueden ser cambiados completamente o incluso destruidos por la contaminación del océano. Hay ecosistemas que pueden ser devastados completamente por las temperaturas cada vez más calientes del océano, como sucede en el caso de las barreras de coral. Estas, también enfrentan otro problema relacionado con la contaminación: la necesidad de agua limpia para vivir. Si la destrucción de las barreras de coral continúa, se estima que 60 por ciento de ellas desaparecerán en los próximos 30 años.

Adicionalmente, este cambio en las temperaturas del agua debido a la contaminación, obligan a ciertas especies marinas a buscar aguas más frías en otras regiones. Esto causa un cambio dañino ecológico en el área afectada.

SALVEMOS LOS OCÉANOS Y PRESERVEMOS LA VIDA

TEXTO: ELENA DIEGO PARRA

FOTOS Y VIDEOS: TOMADOS DE INTERNET