La familia es el elemento primario que sostiene las sociedades. En ella, los individuos desarrollan gran parte de su personalidad. Por eso, no es de extrañarse que al momento de formar un emprendimiento, el primer lugar para buscar apoyo, confianza y recurso humano sea la familia.
Ese es el caso de las gemelas Claudia y Carla Higuerey, quienes desde la necesidad de hacer accesorios para economizar gastos, empezaron a ofrecer sus accesorios y creaciones a familiares y amigos, convirtiendo un pasa tiempo en un modelo de negocio exitoso, hoy reconocido en distintas partes del país, bajo el nombre de CH2 Accesorios.
Desde niñas, las hermanas Higuerey empezaron a crear accesorios con mostacilla, una piedrita básica que venden en las mercerías. Ese fue su primer material para hacer pulseras. "Empezamos muy niñas, apenas con 13 años. Mi hermana Carla, siempre sentía algo de temor en vender. Sin embargo, yo no. Siempre he pensado, que lo que se hace con las manos y con amor te debe llenar de orgullo", señala Claudia Higuerey.
Nuestro papá murió cuando nosotras teníamos 13 años. Allí fue cuando empezamos hacer más accesorios para ayudar a mamá, para no pedirle dinero para la merienda y ese tipo de cosas
Luego de esos primeros pasos, las hermanas Higuerey decidieron hacer accesorios para sus primos, quienes los vendían en sus trabajos. Así, empezaron sus primeros pedidos por encargo. No obstante, el surgimiento formal del emprendimiento CH2 Accesorios, demoró alrededor de 5 años, luego de diseñar una marca con identidad gráfica y poder presentarse ante los medios de comunicación.
Al mencionar los inicios de CH2 Accesorios, las gemelas recuerdan lo importante que era venderse como marca. Hacer énfasis en ese elemento que las diferenciaba de la competencia; resultó una tarea difícil para ellas. "Buscar una identidad es complicado. Esto se logra con ensayo y error. No existe un método que te diga tu estilo es este", sostienen las hermanas Higuerey.
Este emprendimiento, por sus características, se ha visto afectado por la situación económica del país. Existe un alto incremento en los precios de los materiales, que se necesitan para realizar los accesorios. En otros casos, hay escasez de muchos productos. “Recuerdo que mi primera compra de materiales fue en el centro de Puerto La Cruz y gastamos 60 bolívares por una bolsa grande de piedras. Ahorita con eso, no compras nada, quizás un botón o una bolsita de piedras de madera. En cuanto a la escasez, pasa como con la comida. Hay cosas que necesitas y las tiene un solo proveedor a un alto precio, pero lo debes pagar porque lo necesitas”, menciona Claudia Higuerey .
Ante el panorama económico, no todo está nublado para estas hermanas: "En este tiempo hemos aprendido que la crisis te lleva a ser más grande; a través de soluciones innovadoras con los recursos con los que dispongas" señala Claudia Higuerey.
Claudia y Carla, quieren ser un ejemplo para aquellas personas que aspiran o sueñan con crear una marca actualmente en Venezuela. "Una tarea que no es fácil", afirman. Pero, realmente son los detalles los que motivan a estas hermanas. “Ver la felicidad de alguien cuando encontró el accesorio adecuado para ella o para un regalo. Ver la cara de emoción de una novia en su boda, cuando tiene tantos accesorios nuestros encima. Eso, no tiene precio”, indica Claudia.
Actualmente, CH2 Accesorios está en Anzoátegui, Caracas, Maracay y Valencia gracias al apoyo familiar de las gemelas. Además, están en proceso de registrar la marca como empresa. Pero, debido a los retrasos burocráticos del registro, el proceso ha sido lento.
Debido a que una de las hermanas, Carla, se mudó a Houston hace un año, este emprendimiento ha cruzado fronteras hasta Estados Unidos. El objetivo a largo plazo es que CH2 Accesorios se expanda a países de Iberoamérica como España y México. "Todos los países valorar muchísimo las cosas hechas a mano y son muy bien pagadas. Aquí en Venezuela la gente tiene prioridades y no todo el mundo tiene para comprar las piezas más costosas, que suelen ser las más elaboradas", comenta Claudia Higuerey.
No hay duda que los retos de emprender en Venezuela son cada día más difíciles. Ante esto, se necesita de innovación y constancia. Ejemplos como el de las hermanas Higuerey, indican que aún queda recurso humano, que quiere trabajar y producir por el país. Pero se necesita más solidaridad por parte de la sociedad y mayor apoyo del Estado con políticas adecuadas.
